
Esta ensalada es perfecta para los que adoramos las ensaladas con verduras crudas incluso en los meses fríos, cuando ya empieza a asomar la primavera y empiezo a pensar en recetas que ayuden a la depuración hepática.
Los Berros y el Daikon son dos crucíferas, verduras con increíbles propiedades antioxidantes y antitumorales, que además dan soporte al hígado en sus tareas depurativas. El Radicchio da un toque amargo suave que también tonifica el hígado, así que forman un buen tándem. No es fácil de encontrar, pero he tenido la suerte de encontrarme con 2 por casualidad y me han inspirado a hacer esta ensalada.
El Hinojo es una delicia, pero como es un bulbo muy duro y rico en fibra, conviene cortarlo muy finito. Y la Zanahoria, ¡¡¡qué decir de ella!!! No puedo vivir más de dos días sin su dulzor, se la pondría a todo. El Cáñamo es opcional, pero son de las pocas semillas ricas en ácidos grasos Omega 3, además de una muy buena fuente de proteína vegetal. Puedes sustituirlas por cualquier otra semilla que te guste.
Dificultad: baja
Tiempo: 15 minutos
Cantidad: para 3-4 personas
Apto para dietas: Crudivegana, Vegana, sin Gluten, sin Lácteos, sin Huevo
Ingredientes
Para la ensalada
- 75 gr. de Berros, lavados y secos
- 1 Radicchio pequeño, lavado y seco
- 1 Hinojo grande, en láminas muy finas (con la mandolina o un cuchillo bien afilado)
- ½ Daikon, en rodajas finas
- 2 Zanahorias, ralladas
- 2 cucharadas de Semillas de Cáñamo
- 1 puñado de Aceitunas
Para la vinagreta
- 1 cucharadita de Mostaza suave
- 1 cucharada de Tamari
- 2 cucharadas de Vinagre de Manzana
- 1 cucharada de Zumo concentrado de Manzana
- 6 cucharadas de Aceite de Oliva virgen extra de 1ª presión
Si no tienes daikon, los rabanitos o el nabo quedan igual de bien.